Claramente el 2020 cambió el ecosistema educativo. Si hay algo que los educadores debemos tener claro que el Covid-19 ha marcado una bisagra en lo que hace a la forma en que se enseñaba.
En estos meses hemos visto diferentes escenarios en los que hubo docentes que daban su clase magistral sin interactuar con sus estudiantes, y esto se dio en todos los niveles, y docentes que han hecho un giro de 180° en la forma que estaban trabajando.
Escuelas que no entendieron que es una oportunidad para trabajar de forma diferente y otras que lograron su transformación y siguen aprendiendo sobre la marcha pero con clara voluntad de cambio.
La falta de conectividad y de dispositivos ha sido un obstáculo a superar que sigue latente, porque la realidad es que el 2021 nos prospecta un inicio del ciclo lectivo similar al que tuvimos.
En la presencialidad muchas escuelas están organizadas en clases entre 25 y 30 estudiantes lo que es impensable al día de hoy que puedan funcionar de ese modo, por lo que se piensa en un modelo híbrido que combine las aulas digitales y la presencialidad.
Los recortes en el sistema educativo no solo se suceden en Latinoamérica sino que en el continente europeo también se han dado obteniendo aulas acinadas en escuelas públicas con déficit de infraestructura y equipamiento.
Los recortes en salud han tenido un elevado impacto al no poder brindar la atención médica que corresponde pese a los enormes esfuerzos de los equipos sanitarios. La realidad es que sin recursos no se puede hacer demasiado.
Se barajan diferentes soluciones para garantizar la escolaridad sin bajar la calidad educativa. Todos las/os niñas/os y jóvenes necesitan formarse y desarrollar las habilidades que se requieren en el Siglo XXI, pero para eso debemos bajar la deserción y lograr que les interese aprender. De la forma en que lo venimos haciendo eso no está sucediendo.
Hay una frase que conocemos y repetimos: “Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo” Albert Einstein" sin lograr producir los cambios esperados.
La siguiente presentación tiene como objeto reflexionar en la metodología y producir cambios significativos, claro que es indispensable que desde los claustros docentes surjan propuestas mejoradoras, adaptadas a cada contexto para lograr sujetos de conocimiento que puedan resolver situaciones, reflexionar ante cada una de ellas y elaborar la mejor solución posible de manera grupal. La sociedad requiere soluciones intervenciones que nos ayuden a mejorar el contexto y no soluciones individuales, para muestra basta el Covid y esta cuestión de sálvese quién pueda desoyendo cuanta recomendación realicen los organismos que están trabajando para lograr disminuir el contagio y las consecuencias colaterales.
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